Este fin de semana he estado de ocio en Madrid. OCIO así en mayúsculas, han sido 48 horas (todavía sigo en ella, pero hoy lunes he amanecido currando, preparando y descubriendo cositas nuevas que pronto os cuento) verdaderamente non stop en las que he tenido tiempo para todo, ¡menos para dormir, jajajaja!: ha habido tiempo de amigas, cenas de navidad, exposiciones, compras, entrenamientos... Y ha sido tan tan tan intenso, y todo tan fotografiable (es lo que tiene la Navidad) que instagram (mividaenrojo) no es suficiente; asdemás, tengo que compartir muchos planes y lugares con vosotros, ¡así que ahí va mi photodiary, nunca había hecho este tipo de posts así estructurado, pero espero, que os guste! 

Viernes, 13.30h Llegada a Madrid.

Llego a Madrid tras dos estupendas y tranquilas horas de Ave. Paso por casa a dejar maleta y me voy a comer a uno de nuestros lugares favoritos. 1000 cups,---> en verano su terraza está realmente demandada. Lo mejor, los brunch de los domingos, ese aire inglés mezclado con toques de lo más castizo. Pruebo el wrap de salmón: ¡buenísimo!.

A continuación me voy a por el dorsal de la carrera del día siguiente, y a pasear por las tiendas, sobre todo, las de decoración.

Viernes, 19h Maquillaje y Cena de Navidad.

Tarde de maquillaje con Susana, de Mas Belleza Piel, preparando un maquillaje para Navidad (sin que sirva de precedente abandono el rojo de labios para cambiarlo por el marsala). Seguimos con unos vinos en el Mercado de San Antón, ¡con las chicas! ¡Con quién sino! que maravilla por cierto siempre su terraza,la del Mercado digo, y que maravilla todavía más en Navidad. De ahí a Candelita, un restaurante de cocina latina libre, en Chueca, que me encantó.
Ahí descubrí el vino blanco José Pariente (tomar nota si como yo no lo conocíais) y te cercioras una vez más porque hay conversaciones que sólo puedes tener con tus amigas: "que azul tan bonito,¿verdad?, Sí, como la habitación de Carrie en satc"

Sábado, 9h , La carrera de Papá Noel



Domingo de sobremesas que se alargan. The Hovse.



El domingo tocaba entrenar pero amanecí un tanto raruna, así que nada que no arregle un buen desayuno en la cama, ¡antojazo de frambuesas incluido! Un paseo al ritmo de la música; comida tardía con tu mejor amigo tras pasear de su brazo por Gran Vía, como unos turistas más; sobremesas que se alargan en The Hovse (uno de los mercados navideños, ya por excelencia, piqué en él por supuesto, ya os enseñaré más) para enamorarte del increible proyecto de Vasito de Leche (última imagen) y obsesionarte con las coronas de flores naturales de Brumalis, ¿no os parece cualquiera de ellas maravillosa como cabecero? Y finalizar con un café navideño en Starbucks y un abrazo de, ¡vuelve pronto! que digo, ¡te espero en Lleida!