Os contaba por las redes sociales, hace casi dos semanas, que mi sweet sister emprendía el viaje a la que iba a ser una de las mejores experiencias de su vida. Horas antes de llevarla al aeropuerto verbalizaba que iba a intentar hacer un diario de la experiencia e incluso sugirió la idea de abrirse un blog, por supuesto le ofrecí Mi vida en Rojo y aquí está su primer post. ¡Espero qué os guste esta idea! También podéis seguirle en instagram: @moiro_ para descubrir mucho más sobre Perú con ella.
El vértigo solo se siente hasta el momento que saltas.
Como todas las decisiones algo importantes que he tomado a lo largo de mis humildes 22 añitos, con todas y cada una de ellas he sentido vértigo. Hace unos meses que me lancé en picado a vivir una aventura que durará 4 meses en Lima. Ya ves, 4 meses, que no son nada.
A pesar de ello, confieso que si dos días antes de partir me hubieran ofrecido olvidar todos los planes y hacer como que nada se me había ocurrido me lo habría replanteado. En cuanto me subí al avión desapareció el vértigo, ya había saltado y solo quedaba disfrutar del salto. Hoy, después de exactamente una semana aquí, confieso también, que ya ha valido la pena.
La llegada fue chocante. Hasta el aire que se respira es diferente y eso, es innegable. Entre sonrisas descubrí un cartelito con mi nombre y desde ese momento me sentí a gusto.
He tenido suerte, muchísima suerte. Gente que sin haberles visto nunca hacen que me sienta en casa y me dan lo mejor de ellos, de su ciudad y de sus costumbres.
En esta primera semana he tenido tiempo de visitar algunos lugares de los más emblemáticos de la ciudad y el lugar donde voy a trabajar en el que no han podido acogerme con más calidez. Estoy aprendiendo vocabulario, para qué engañarnos, son muchas las veces que necesito traducción. Y cómo no nombrar el mayor evento de mi semana, estuve en una peña. Como Fátima me decía, no podía haberme llevado a un lugar más peruano que ese y me encantó. Fue divertidísimo. Maravillosos espectáculos de música criolla en su mayoría con el culmen de la actuación de Eva Ayllon, a la cual no conocía e igualmente me vi envuelta en la euforia máxima que en aquel lugar se generó. Familias enteras se lanzaban a bailar a la pista entre espectáculo y espectáculo. ¡Qué costumbre más sana! ¿Por qué no bailamos más? Propósito nuevo a la vista: bailar un poquito más y mejor. (Veremos si se consigue, jajaja!)
Ah! Y he comido, he comido hasta anticuchos (corazón de vaca). Quién me ha visto y quién me ve. Prácticamente no he parado de probar cosas, la chicha morada, la palta, el aguaymanto, el taramindo, el pisco, el tamal, los churros rellenos… ¡y todo riquísimo!
Este ha sido mi resumen de mi primera semana en la ciudad de Lima. Seguiré aprendiendo de todo esto y aprovechando el tiempo al máximo para no perderme nada. ¡Primera fase del salto superada! ¡A por la siguiente!
¡¡Gracias por todos vuestros comentarios y visitas!! Por cierto, ya le veis, vistiendo sudaderas Mi vida en Rojo: "El verano del Amor" que lleva en la primera imagen la podéis encontrar aquí; y nuestra ya clásica Besos rojos por doquier (que ahora está de rebajas) aquí.
Nos vemos con mucho más en las redes sociales,
instagram: @mividaenrojo
Today's photo diary about my sister's experience in Lima! Please, if you would like to read this post on another language, select it, on the right side box!
Thanks for reading!
Have a nice weekend!!
;-)
Be happy (and fashion) my friend.