Dígase de la palabra Camafeo toda aquélla figura tallada en relieve en una piedra preciosa. Es decir, que tan pronto podemos encontrar un Camafeo decorando magníficamente la pared de un comedor como lo podemos encontrar en una headband, pendientes, broche, anillos... complementando nuestro outfit. Esta línea que separa y une el arte en su totalidad, que lo permite todo...¡Es una de las cosas que más me apasionan de la moda!

Mira que me gustan los Camafeos...¡sí, cómo me gustan! Y no sé porque ahora que se acerca Navidad aún más, llevo unos días que mientras pienso en qué vestir y (muy importante) cómo complementarlo, sólo me vienen a la mente camafeos y más camafeos, pero eso sí, son aptos para todos los públicos y en todas las épocas del año. Además tienen la exclusiva propiedad de lo vintage: nunca pasa de moda.

Los podéis encontrar de miles de formas, colores, modelos, tamaños, en miles de tiendas (no os olvidéis de buscar en aquéllos sits de aquéllos nuevos talentos que los crean con sus propias manos) y tampoco os olvidéis de daros una vuelta por el baúl de vuestras abuelas...

Y para las más atrevidas y mañosas, en todo para camafeos podéis encontrar las piezas para crearlos vosotras mismas, me gustaría intentarlo...pero no tengo tanta paciencia... De momento, mi madre me regaló uno hace unos años...voy a rescatarlo del cajón.



Be happy (and fashion) my friend.